Cómo Funciona la Dopamina. Esto es lo que Nadie Dice

Todos hemos oído hablar muchas cosas de la dopamina. Pero hay un problema, mucho de lo que hemos escuchado hablar de la dopamina es impreciso, o directamente, no es cierto. Aquí te enseño cómo funciona la dopamina de verdad.

En este artículo te mostraré una forma sencilla y completa todo lo que aprendí de este tema mediante diversas fuentes científicas, para que puedas entender mejor al final: qué es y para qué sirve la dopamina, y sobre todo cómo es que realmente funciona.

Cuándo se descubrió la dopamina

Curiosamente, la importancia de la dopamina fue descubierta por accidente. En 1954, James Olds y Peter Milner, tras implantar unos electrodos en el cerebro de una rata, dieron por casualidad en el núcleo accumbens, parte fundamental de los circuitos de la dopamina. Estos científicos consiguieron bloquear la producción de este neuroquímico por lo que al tiempo los roedores dejaron de moverse, al punto que murieron de sed.

Qué es la dopamina

Este experimento fue el puntapié de muchos otros estudios que hoy nos permiten responder muchas preguntas sobre la dopamina. Como, por ejemplo: ¿qué es? La dopamina es considerada hoy en día un neuromodulador, y no un neurotransmisor, esto es porque está involucrada en muchas tareas y no solo en una, como suele pasar con los neurotransmisores.

La misma se libera en nuestro cuerpo de dos formas diferentes: de forma local y de forma volumétrica. Es decir, que es capaz de activar, o desactivar, un grupo muy específico de neuronas (forma local), o bien, hacerlo de forma más masiva (volumétricamente).

Para qué sirve la dopamina

La dopamina está involucrada en muchas tareas diferentes, tales como la forma en que nos sentimos, el movimiento físico, el aprendizaje o la percepción del tiempo, y quizás la más importante: la motivación. Si, dije motivación y no placer. Probablemente, este sea el mayor malentendido que la mayoría tiene cuando piensa en la dopamina. Y para dejarlo más claro, la dopamina no genera el placer, más bien nos empuja hacia el placer. Pongamos por ejemplo que a mi me gusta mucho jugar videojuegos. Vengo de trabajar, veo la play, y, oh, siento un gran deseo de jugar. Esto hace que mis niveles de dopamina se incrementen sustancialmente, lo que me empuja a ir y jugar, y cuando lo hago, mis niveles de dopamina decaen.

Cómo funciona la dopamina

La razón de esto se debe a que la dopamina actúa principalmente en dos circuitos: El primero es conocido como: Sustancia negra, que es responsable sobre todo del movimiento. Y el segundo es el clásico Sistema de recompensa, encargado de empujarnos hacia aquello queremos alcanzar.

Ahora bien, en una situación como esta muchos pensaran que la dopamina solo actúa cuando algo muy deseable aparece, pero no es cierto. Nuestro cuerpo utiliza la dopamina constantemente. La razón está en lo que mencioné anteriormente, la dopamina interviene en muchas tareas. Este uso constante de la dopamina se conoce como: fase tónica, y se representa con una línea de base que muestra ciertos niveles estables de este neuromodulador que circula en nuestro cuerpo. Luego está la fase fásica, que representa ese aumento en la motivación y el deseo, y se grafica con un pico por encima de la línea de base. Este pico en el deseo suele durar un breve periodo de tiempo, usualmente hasta que conseguimos eso que anhelábamos o dejamos de perseguirlo, para luego volver a la línea de base o fase tónica.

En el ejemplo que les di, la línea de base sería estar en movimiento o la forma en que me siento en ese momento, por ejemplo, y el pico sería tener muchas ganas de jugar a la play. En resumen, la dopamina nos motiva, gracias a que interviene en el sistema de recompensa, y nos mueve, porque actúa también en la sustancia negra, pero no genera el placer.

En este sentido la dopamina es como el combustible que mueve un auto hasta la línea de meta, pero lo que pasa una vez la cruza es otra cuestión. Es la razón de porque, cuando James Olds y Peter Milner cuando le quitaron la dopamina a los ratones, estos no hacían absolutamente nada. Incluso, es posible seguir experimentando placer aunque tengas niveles muy bajos de dopamina.

Los “picos de dopamina” y cómo funcionan

Okay, ahora que ya saben cómo funciona realmente la dopamina, de seguro están muy interesados en esto de los “picos de dopamina”, ya que es lo que muchos buscamos alcanzar. Y esto es lo que tienen que saber. Si bien la dopamina puede llegar a tener efectos muy prolongados, los picos no suele durar mucho, y por ende, la excitación que produce tampoco. Por lo tanto, todo lo que sube tiene que bajar. Por otro lado, el que tan alto sean esos picos de dopamina dependerá de algunas cosas, entre ellas, el tiempo de recuperación entre un pico y otro.

En este estudio se ve como se compara la liberación de dopamina dejando más y menos espacio entre cada pico. Como ven, los picos tienden a ser más altos cuando se deja mayor tiempo y espacio de recuperación, que si intentamos empujar en nuestro cuerpo más dopamina de forma repetida.

Se preguntarán: ¿por qué pasa esto? La razón es sencillamente porque nuestro cuerpo tiene un presupuesto de dopamina que se va gastando a lo largo del día y que tarda en recuperarse. Si intentamos darnos golpes de dopamina constantemente, no le damos tiempo a las neuronas para que reestablezcan los niveles de este neuromodulador. Volviendo al ejemplo de recién, si yo juego a la play todo el tiempo, más temprano que tarde me voy a cansar y esa experiencia será menos deseable y hasta menos placentera, porque no hay más dopamina básicamente.

Tengan en cuenta también que la dopamina es liberada por muchas cosas, no solo jugar videojuegos como en este caso. Cosas como: la comida, el sexo, el ejercicio, perseguir un objetivo, etc., gasta dopamina y termina por influenciar cuanta dopamina hay disponible para otras cosas.

La línea de base de dopamina, y cómo funciona

Ahora bien, es posible, por las razones que sea, que nuestra línea de base esté más arriba de lo usual, lo cual significa que estamos más motivados y que hay más dopamina circulando.

Pero como una experiencia tiene una determinada capacidad de liberar dopamina, el punto máximo del pico seguiría siendo el mismo pero las distancia entre el pico y la línea de base, no. Por ende, la percibirían como menos excitante. Esto significa que el qué tan deseable o placentera sea una experiencia no depende solamente de la altura del pico, sino, de la altura del pico relativa con la línea de base.

Por otro lado, y presten atención porque esto es muy importante, mi estado general (línea de base), e incluso, mis experiencias previas (los picos) y cuándo las experimento, también afectan de manera determinante en como percibo otras experiencias futuras. Por ejemplo, si me dieron una gran noticia en mi trabajo eso hará que me de un pico de dopamina, y si intento jugar videojuegos al poco tiempo, voy a percibir esta última experiencia como menos deseable. Porque la distancia entre una experiencia y otra es muy corta, ¿recuerdan esa parte?.

Ahora si tomamos esta misma situación, pero juego a la play pasados 2 días de esa gran noticia, el pico de dopamina seguramente será mucho más alto. Esto puede llegar a pasar de la misma forma pero a la inversa, si mi estado de animo es menor, puede que una gran noticia se sienta cómo lo mejor que me haya pasado solo porque mi estado motivacional era más bajo de lo usual.

La dopamina en una adicción

Pero, ¿qué pasa con la dopamina cuando hay una adicción? Vale aclarar que la adicción es una cosa bastante compleja que está influenciada por muchos factores. Pero para hacerla corta, lo que pasa con la dopamina es que, en las etapas tempranas de una adicción, ya sea, por una sustancia o un comportamiento, es casi lo único capaz de lograr esos picos de dopamina. Conforme pasa el tiempo, la capacidad que una adicción tiene de liberar dopamina se reduce, al punto que ni siquiera eso que antes producía tanta excitación ahora lo hace, y eso puede terminar en una depresión profunda.

¿Razones? Una de ellas es lo que ya les expliqué: el agotamiento de las neuronas y las reservas de dopamina. La otra razón es el desarrollo de una mayor tolerancia lo que hace más difícil sentir tanto excitación como placer. En resumen, podríamos decir que la adicción pone a andar a la maquina de dopamina a todo lo que da y eso termina por fundirla.

Hasta aquí es todo lo que les puedo comentar sobre la dopamina y todo lo que aprendí al respecto. Pueden revisar los links, para más información al respecto. Espero les haya sido útil.

Franco Raya

Creador de Brainials